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Actividad fisica

Hombre y mujer estirando

Levántese y póngase en movimiento. Junto con una dieta saludable, el ejercicio puede ayudar a facilitar la evacuación intestinal y esto, a su vez, puede ayudar a reducir el riesgo de que se produzcan exacerbaciones y aparezcan nuevas hemorroides. Este es un paso en la dirección correcta.

¿Es seguro hacer ejercicio?

No hay ninguna razón para evitar el ejercicio por las hemorroides, a menos que se sienta incómodo. Si no se siente bien con algún ejercicio, elija otro ejercicio diferente.

Si ha tenido anteriormente exacerbaciones de las hemorroides, posiblemente desee evitar ejercicios que aumenten la presión en la zona anal, ya que eso puede ser un factor desencadenante de exacerbaciones. Algunos ejemplos de este tipo de actividad son montar a caballo o en bicicleta (porque ejercen presión sobre el recto) y levantar pesas (porque implica un gran esfuerzo y tensión, y aplicar presión de empuje sobre la zona del recto).

LO QUE PUEDE HACER

Reducir el riesgo de las exacerbaciones

Algunos ejercicios pueden ayudar a reducir el riesgo de sufrir exacerbaciones al estimular la función intestinal y/o tonificar la zona rectal. Estimular la función intestinal limita el estreñimiento (una de las causas de las exacerbaciones de las hemorroides). El ejercicio que estimula la frecuencia cardíaca aumenta el flujo sanguíneo hacia la zona rectal. Esto fortalece el tejido de sostén (lo que ayuda a prevenir exacerbaciones) y lleva nutrientes y oxígeno a las zonas inflamadas (lo que ayuda a aliviarlas).

La actividad física moderada, tal como caminatas rápidas de 20 minutos por día, puede estimular la función intestinal* y mejorar el flujo sanguíneo y el tono muscular. Otras actividades cardiovasculares beneficiosas son correr, nadar y practicar ejercicios aeróbicos.

* Harvard Health Publications. “Hemorrhoids and what to do about them.” Harvard Women’s Health Watch, 2004.

Algunos ejercicios, como el yoga, mejoran el tono muscular y pueden reducir los síntomas y el riesgo de sufrir exacerbaciones. Para fortalecer y tonificar los músculos pelvianos y anales, pruebe:

Ejercicios de Kegel

Los ejercicios de Kegel pueden ayudar a las mujeres a fortalecer el piso pélvico además de los músculos anales y rectales, particularmente después del parto. Esto puede ayudar a la digestión y evitar el estreñimiento. Para hacer un ejercicio de Kegel, contraiga los músculos vaginales (tal como si necesitara detener el chorro de orina), manténgalo durante algunos segundos y luego suelte; repita varias veces. Es un ejercicio discreto que usted puede hacer en casi todas partes.